Agilidad física

Agilidad física. Es la capacidad de aprender en corto tiempo movimientos de una difícil ejecución, así como de reaccionar rápidamente con movimientos adecuados ante situaciones cambiantes. La palabra agilidad depende de la cualidad ágil y del verbo "vol­verse, moverse". Ser ágil significa por ello, tanto como ser móvil, no ser torpe. Por lo tanto, la agilidad es necesaria en toda disciplina deportiva. En las disciplinas con movimientos de difícil realización es especialmente importante para el aumento del rendimiento.
Surgimiento de la agilidad

Los movimientos deportivos muchas veces resultan difíciles en su realización. Mediante las corrientes nerviosas se siempre determinados músculos en la sucesión y en el momento requerido para el desarrollo del movimiento. Es necesaria una compleja conexión de las bandas nerviosas responsables de esos músculos en el sistema nervioso central (SNC), para que ocurra una acción conjunta de los músculos que resulte adecuada y correcta. Este proceso se denomina coordi­nación.

Los nuevos movimientos se forman sobre la base de otros viejos ya existentes. Por lo tanto, mediante el entrenamiento se aumenta progresiva­mente el caudal de movimientos. A través de ellos, el deportista aprende nuevos movimientos no sólo con mayor facilidad y rapidez, sino que está en condiciones de reaccionar con movimientos ade­cuados ante situaciones competitivas rápidamente cambiantes.

Ejemplos En el juego de balompié por ejemplo el jugador debe acondicionarse constantemente a la nueva situación del juego. El luchador debe responder inmediatamente al ataque del contrario con un eficiente movimiento de retroceso y pasar al contra-ataque lo más rápidamente posible. En las carreras de esquí el corredor debe reaccionar a las condicio­nes cambiantes de la nieve y del tramo de la carrera mediante movi­mientos adecuados. El corredor de 5000 metros debe estar en con­diciones de proteger su cuerpo de un Tropezón con un movimiento de equilibrio.

El atleta debe estar en condiciones de calcular la realización y la eficacia de los movimientos con ayuda de todos los analizadores (órganos de los sentidos), para en lo posible poder prever la corrección o cambio de la trayectoria del movimiento.

Desarrollo de la correcta agilidad

Las personas más ágiles tienen un mayor éxito en el deporte. Pero la agilidad sólo la alcanzas mediante el entrenamiento. Todo atleta debe realizar ejercicios de agilidad para el mejoramiento de la multilateralidad de los movimientos. Muchos son los ejercicios apropiados para ello. Pero en cada disciplina deportiva hay de­terminados ejercicios de agilidad, que son típicos para el curso del movimiento de una disciplina, así como por ejemplo ejercicios de agilidad con la pelota para las disciplinas deportivas de juegos con pelota.
Autocontrol Realizar con regularidad la carrera de agilidad como una prueba. Medir el tiempo que se necesita para vencer la distancia. Atender a que sean las mismas distancias y los espacios entre los obstáculos. Anotar el tiempo de la primera carrera allí donde está la flecha y completar ahora la tabla añadiendo los valores enseguida.